Los analistas Carmen Beatriz Fernández y Héctor Briceño compartieron sus ideas de cómo la oposición venezolana puede mitigar los riesgos antes de las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio, en una emisión especial del programa #ConLaLuz que se realizó este domingo, 30 de junio, día de simulacro en Venezuela.
Fernández recordó que al gobierno de Nicolás Maduro no le han funcionado las estrategias del pasado, entre ellas el jugar a la división opositora, el desestimular el voto y las narrativas de que sus adversarios responden a los intereses de Estados Unidos y los gobiernos de Europa, en la entrevista con la directora general de Efecto Cocuyo, Luz Mely Reyes.
Sin embargo, habló de «pequeños fraudes» para beneficiar al chavismo que viene aplicando el Consejo Nacional Electoral (CNE). Entre ellos mencionó el impedir el derecho al voto a 5 millones de migrantes; el cambio de nombre de escuelas que funcionan como centros de votación y la migración de votantes dentro del país con la creación de nuevos colegios electorales.
«Vemos que el oficialismo está carente de mensajes y es un elemento importantísimo en cualquier campaña y vemos que hay una debilidad de las ofertas de Nicolás Maduro y debe apegarse a los desincentivos, lo que estamos viendo en esta campaña de Maduro es mucho más garrote que zanahoria, expresa las dificultades del oficialismo de conectar con sus propias bases», explicó.
Cuáles son los riesgos electorales para el 28J
Briceño hizo mención al informe sobre los riesgos electorales que elaboraron para el Observatorio Global de Comunicación y Democracia. Citó que hay dos tipos de riesgos; los administrativos por decisiones del CNE como la creación de nuevos centros electorales y los segundos si hay abstención elevada o votación por encima del 75 % a favor del chavismo o la oposición.
«18 millones de votantes participan en centros con algún nivel de riesgo y más de 2 millones votan en centros de votación de altísimo riesgo. Esto nos dice que los electores al día de la votación tienen que enfrentarse a lo que vimos (en el simulacro) en estos recorridos como puntos rojos, militares que promocionan o impiden la votación de electores; amenazas desde gente que utiliza los programas sociales como promoción, que le dicen que si no votan por el presidente no van a tener estos beneficios o se les va a quitar alguno de los que tiene», resaltó.
Qué pasó en el simulacro electoral
En el programa se hicieron reportes desde varios puntos de Caracas y Maracaibo (Edo Zulia) donde tres periodistas de Efecto Cocuyo hicieron recorridos por el simulacro.
Desde la parroquia Sucre, en Caracas, Iván Reyes contó el descontento que había en la escuela Manuel Antonio Caro por la lentitud para que las personas pudieran practicar. Mostró imágenes de personas reclamando a las puertas de la institución.
Una de las causas es que se trata de centros nucleados, donde habilitan de dos a tres máquinas y si la participación es mayoritaria, se retrasa.
Desde Petare, la periodista Albany Andara dijo que hubo una situación similar. En la escuela José de Jesús Arocha, la más grande de esa parroquia, había tres colas: una de funcionarios públicos, otra para las personas de la tercera edad y con discapacidad y una para el resto de las y los electores.
Además, el Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv) instaló los llamados puntos «azules», antes rojos. Después de que las personas participaron en el simulacro debían ir a anotarse en una lista y en el caso de los trabajadores de la administración pública había hasta un documento en línea para colocar su nombre y apellido.
Desde Maracaibo, Rosmina Suárez dijo que el proceso transcurrió en centros de votación más retirados, donde la presencia de los jóvenes era mayoritaria, a diferencia de los de Caracas, en los que las personas que más estaban en cola eran de la tercera edad.
Qué debe hacer la oposición
Briceño dijo que una de las formas de combatir y mitigar los riesgos era que se colocaran testigos en las más de 15 mil mesas y más de 30 mil mesas de votación, con una participación masiva ciudadana que se quedara a la espera de la auditoría ciudadana para evitar trampas.
Fernández habló del simulacro y dijo que más allá de que el CNE evalúa cómo se comporta el sistema de votación, el Psuv lo hace para «medir esta maquinaria, cómo está funcionando y qué tan bien está respondiendo a los incentivos tradicionales».
Dijo que uno de los quiebres dentro del chavismo es que los motorizados, que antes se veían atacando a opositores ahora apoyan de forma masiva los recorridos de María Corina Machado por el interior del país.
Citó los estudios de opinión que le dan una ventaja de 25 a 30 puntos de ventaja a Edmundo González Urrutia por sobre Maduro, lo que tiene preocupada a la clase gobernante y por eso promueve esos «micro» fraudes para «inclinar la cancha electoral a su favor».
«Esta no es una elección normal, es una elección en un país que tiene la democracia secuestrada. Esa diferencia es tan amplia que existe la oportunidad para el cambio político», añadió durante su análisis.
Vea el programa especial completo en este enlace:
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