Luego de la histórica conversación telefónica de una hora que sostuvieran el presidente de China, Xi Jinping, y el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, el pasado 26 de abril, los líderes europeos se muestran cautelosamente optimistas, mientras se afirma que el presidente francés Emmanuel Macron estaría preparando un plan que involucraría a Pekín para sentar a Rusia y Ucrania a la mesa de negociaciones este verano.

Si bien las declaraciones oficiales de ambas partes no dieron mayores detalles sobre la llamada, el Ministerio de Asuntos Exteriores chino citó al presidente Xi, afirmando que el diálogo seguía siendo la única salida viable al conflicto. También destacó la advertencia del líder chino: ninguna parte saldrá victoriosa de un conflicto nuclear.

Por su parte, el presidente Zelensky elogió el intercambio de una hora, describiéndolo como «largo y significativo», mientras que del lado chino fue notable la omisión de dos palabras: «Rusia» y «guerra». El presidente Xi se enfocó en buscar una «solución política a la crisis ucraniana» e insistió en los efectos potencialmente devastadores de una escalada nuclear. 

Según la agencia estatal china de noticias Xinhua, Pekín no exacerbaría el conflicto echando «leña al fuego» y subrayó la importancia de resolver la crisis por medios políticos.

El contacto más reciente entre los presidentes Xi y Zelensky antes de la llamada del 26 de abril  tuvo lugar en enero de 2022, pocas semanas antes de la invasión rusa a Ucrania. Tal interacción ocurrió en el marco de la conmemoración del 30º aniversario de las relaciones diplomáticas entre ambos países.

Una de las principales preocupaciones de Ucrania y sus aliados en occidente es la posibilidad de que China se convierta en una actor más activo en el conflicto, específicamente como facilitador de armamento letal para Rusia, lo que podría inclinar la balanza y prolongar aún más el conflicto. Al instar a Xi a mantener una postura neutral, Ucrania y sus partidarios europeos esperan evitar este escenario y fomentar en su lugar una resolución diplomática de la crisis.

Mientras Estados Unidos han criticado a China por su postura aparentemente favorable a Rusia, Zelensky ha adoptado un enfoque más comedido, elogiando el reciente plan propuesto por China para alcanzar la paz entre Ucrania y Rusia como «una señal importante», incluso cuando muchos gobiernos occidentales lo rechazaron por considerar que carece de sustancia y soluciones concretas y duraderas. 

El Presidente Zelensky ha intentado persuadir a China destacando el compromiso de Pekín con la soberanía territorial. Sin embargo, Ucrania es consciente de la reticencia de China a emitir declaraciones en contra de las acciones bélicas de Rusia, por ser un aliado clave de Putin, a quien el mismo presidente Xi se ha referido como “un amigo íntimo”.

El papel de China en Ucrania: los intereses económicos que impulsan la estrategia diplomática 

En un esfuerzo por desviar las críticas sobre su apoyo a Moscú y posicionarse como un actor diplomático clave, China ha anunciado que enviará a su Representante Especial para Asuntos Euroasiáticos a visitar Ucrania para entablar una comunicación exhaustiva con todas las partes implicadas en la resolución de la crisis.

En los últimos meses, Xi ha tratado de pulir su imagen pública ayudando a restablecer los lazos diplomáticos entre Arabia Saudita e Irán, y extendiendo la alfombra roja en Pekín a los líderes mundiales que visitan el país, más recientemente al presidente francés Emmanuel Macron.

Sin embargo, funcionarios estadounidenses y sus aliados han puesto en duda que Xi tenga la capacidad de mediar por la paz en Ucrania, o incluso la intención de hacerlo, dados sus estrechos vínculos con el Kremlin. En febrero, China dio a conocer un plan de 12 puntos que trazaba un camino para poner fin a la guerra, pero este fue recibido con escepticismo, ya que era vago y no mencionaba la ocupación rusa de más de una sexta parte del territorio ucraniano. También fue muy criticado por reflejar una postura indulgente de Pekín hacia Rusia, al omitir referencias a las violaciones de los derechos humanos cometidas por el Kremlin en el conflicto.

Rusia se pronunció con respecto a la llamada telefónica entre Xi y Zelensky a través de su Ministerio de Asuntos Exteriores. «Tomamos nota de la disposición de la parte china a esforzarse por trabajar en un proceso de negociación», declaró la portavoz del ministerio, Maria Zakharova, y añadió: «Es poco probable que cualquier iniciativa de paz sea bien recibida por los títeres controlados por Washington».

Ucrania y China no sólo mantuvieron una relación cordial previa a la invasión Rusa en Ucrania, sino que han sido socios comerciales por años. Según un informe del Council on Foreign Relations, en 2019 China se había convertido en el mayor socio comercial de Ucrania y el principal destino de sus importaciones de mineral de hierro y cebada.

Antes de la guerra, el gobierno ucraniano había abierto una licitación a empresas chinas para construir una nueva línea de metro en Kiev. En 2021, Olena Zelenska, esposa del Presidente Zelensky, fue invitada a dar el discurso virtual de bienvenida a los asistentes al Festival Internacional de Cine de Pekín, mostrando el nivel de cooperación económica y acercamiento cultural que existía entre ambos países. 

Ucrania también desempeñaba un papel importante en la economía china, siendo su mayor fuente de maíz y su segundo proveedor de armas. China incluso adquirió su primer portaaviones, el Liaoning, comprando a Ucrania un buque soviético retirado del servicio, que fue reacondicionado para la armada china.

China ha suavizado su retórica, especialmente mientras busca mejorar las relaciones con Europa y establecer nuevos lazos económicos. Funcionarios chinos han minimizado recientemente la importancia de la declaración de la «amistad sin límites» entre Rusia y China. El embajador de China ante la Unión Europea, Fu Cong, dijo que China no estaba del lado de Rusia en la guerra y que algunas personas «malinterpretan deliberadamente la llamada amistad o relación sin límites [con Rusia]».

El gigante asiático podría tener un importante interés económico en Ucrania, ya que fue uno de sus mayores socios comerciales antes de la guerra. Con la posibilidad de un final eventual del conflicto y la consecuente necesidad de reconstrucción, China podría encontrar oportunidades para expandir sus lazos económicos con Ucrania y Europa, jugando un papel activo en la reconstrucción. 

Según Janka Oertel, directora del Programa para Asia del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, el gobierno chino ve en la reconstrucción de Ucrania una oportunidad para formar parte de un reordenamiento de posguerra. “Al gobierno chino le gustaría mantener esa relación económica lo más abierta posible», aseguró.  

Zelensky y Xi Jinping: de la llamada para acá