El COVID-19 ha traído un sinnúmero de cambios en nuestras costumbres y en nuestra forma de vivir.  Ahora muchos se cuidan al punto de preferir no tener contacto físico con nadie aparte de su círculo muy cercano que puede reducirse a sí mismo o a una persona.  Usamos máscaras y hemos tenido que aprender a sonreír con los ojos. Vivimos con el miedo de enfermarnos o de contagiar a otros.  Hay otros que han decidido no vacunarse y seguir viviendo sin mascarillas.  No obstante, como hablaba con alguien, uno puede decidir vivir como uno quiera pero hay que estar pendiente de las regulaciones porque nuestras decisiones pueden afectar lo que pretendamos hacer.

Con el tema del COVID-19, las personas que acostumbran a viajar por temas de trabajo, por razones familiares o por cualquier otra razón, tienen que estar pendientes de cumplir con todas las regulaciones.  Hay universidades en algunos países que exigen que sus estudiantes estén vacunados para que puedan regresar a estudiar en sus aulas en forma presencial.  Hay países que requieren que se presente una prueba de PCR hisopada nasal negativa para permitir la entrada de cualquier persona.  No aceptan la prueba de antígenos.  Hay otros que igualmente requieren de una cuarentena voluntaria al llegar al país, a menos que uno tenga un certificado que evidencie la vacunación.  Cada vez es más importante verificar los requisitos de cada país y de cada institución para prevenir que se presenten obstáculos para nuestra movilización o para que llevemos a cabo otras actividades.  Aún creyendo que hemos cumplido con todo lo que requerimos, debemos estar preparados para cualquier imprevisto que pueda afectar nuestros planes.

Me he encontrado con mucha gente en el camino que se ha quedado atrapada en un país por no haber cumplido con las regulaciones.  Tienen que incurrir en costos adicionales, cambiar sus planes y pasar momentos de angustia.  A veces es por falta de información adecuada de parte de las agencias o de quienes prestan servicios relacionados con el COVID-19. Urjo a todos los que vayan a viajar a verificar de antemano en detalle todos los requisitos para su viaje tanto del país de origen como del país de destino. También urjo a quienes presten servicios relacionados con viajes o con el COVID-19 a proveer toda la información relevante que pueda ayudar a quienes deban tomar decisiones relacionadas con el virus o con un viaje.  Mientras más información clara y oportuna compartamos, mejor será.

¡Prendamos una vela y pasemos la luz!

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