La Federación de Colegios de Contadores Públicos de Venezuela (Fccpv) volvió a solicitarle a la Asamblea Nacional, el Servicio Nacional Integrado de Administración Tributaria (Seniat) y a la administración de Nicolás Maduro que revise las normas actuales del Impuesto sobre la Renta (ISLR) y mejore el esquema de declaración para evitar el impacto tributario en los trabajadores.
Los contadores públicos recordaron que la Unidad Tributaria tiene un valor actual de 9 bolívares, que no se ajusta desde mayo de 2023. Esta es la razón para que cualquier trabajador formal que haya percibido un total de más de 9.000 bolívares durante el año pasado esté en la obligación de declarar y pagar el ISLR.
Lo mismo sucede con los profesionales independientes que facturaron por más de 13.500 bolívares y los trabajadores del campo con rentas por más de 23.625 bolívares durante 2024.
“El número de personas obligadas a cumplir con la norma legal tributaria, así como con el deber formal de declarar y pagar el Impuesto sobre la Renta abarcaría prácticamente a casi todo el universo de personas naturales que generen rentas en Venezuela, lo cual trae como consecuencia una carga impositiva mayor que impacta su calidad de vida”, apuntó el gremio de los contadores en un comunicado público.
En términos concretos, las normas actuales del ISLR obligan a que cualquier maestro, enfermera, profesora universitaria, cajero de supermercado, vendedora de tienda o campesino a pagar este impuesto, cuyo principio era que la contribución tributaria mayor fuese hecha por las personas más adineradas de la sociedad venezolana.
¿Por qué ocurre esto con el ISLR?
La actual legislación del Impuesto sobre la Renta está atada a la Unidad Tributaria, pero su valor quedó desfasado cuando el país entró en un ciclo hiperinflacionario en el año 2017. Esta subestimación tributaria también ocurre con los desgravámenes, que son los descuentos que puede presentar cualquier contribuyente para justificar un pago menor de ISLR.
No en vano, el gremio de contadores públicos resaltó que la normativa vigente del ISLR “adolece de un rezago importante con relación a la realidad actual de la economía nacional”, lo que termina por recargar “a los contribuyentes de forma exagerada con el pago” de este tributo.
Un ejemplo es que un trabajador formal con un salario de apenas 50 dólares mensuales durante el año pasado estaría obligado hoy a pagar cerca de 62,55 dólares por concepto del ISLR, si se hace el cálculo con una tasa de cambio oficial de 56 bolívares por dólar.
En otras palabras, la carga tributaria de un trabajador en un rango bajo de la pirámide laboral supone el pago tributario de más de un mes de salario completo que debe cancelar al fisco nacional, a pesar de que su salario tiene un valor muy por debajo de la canasta básica alimentaria mensual y, eso sin considerar, si se trata de un pilar familiar que deba atender los gastos de hijos o padres mayores.
Por eso, los contadores públicos llamaron a las autoridades nacionales a emitir una norma legal que sea de aplicación inmediata y que permita que las personas naturales no se vean impactadas por esta carga tributaria excesiva, antes de que venza el plazo de declaración del ISLR fijado para el próximo 31 de marzo de 2025.
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