Daniel Noboa, de 35 años y empresario heredero de un imperio económico que comprende la mayor instalación de almacenamiento de contenedores del país y las industrias de fertilizantes, plástico y cartón, se alzó con la victoria en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas en Ecuador el domingo 15 de octubre, convirtiéndose en el presidente electo más joven de la historia de Ecuador. 

En las calles de Quito sonaron las cornetas de los autos en celebración por la victoria del presidente electo Noboa, quien prometió recuperar una nación asediada por el crimen y  una brutal guerra entre cárteles de la droga. 

Desde Olón, su ciudad natal, ubicada en la costa occidental en la provincia de Santa Elena, Noboa se dirigió a sus votantes: «Mañana empezamos a trabajar por este nuevo Ecuador, empezamos a trabajar para reconstruir un país seriamente golpeado por la violencia, por la corrupción y por el odio». 

Con aproximadamente el 96% de los votos escrutados, las autoridades electorales informaron que Daniel Noboa obtuvo el 52,2% de los votos, mientras que Luisa González, abogada de izquierda y aliada del expresidente Rafael Correa, condenado a ocho años de cárcel, a 25 de inhabilitación y actualmente en el exilio, obtuvo el 47,8%.

Ante este resultado, González reconoció su derrota en un discurso a sus partidarios el domingo por la noche y expresó su intención de llamar y felicitar a Noboa.

Durante la campaña presidencial, el discurso político giró alrededor de la seguridad. Noboa prometió “restaurar la paz” un mensaje que resonó entre un electorado que ha percibido un aumento creciente en la actividad delictiva en el país desde hace tres años, y que alcanzó un pico con el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio el 9 de agosto de 2023, cuando salía de un acto de campaña.

Las elecciones presidenciales en Ecuador fueron adelantadas cuando el saliente presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, disolvió la Asamblea Nacional en mayo para evitar un intento de destitución por parte de políticos de la oposición. 

La moción de destitución que enfrentaba Lasso fue impulsada por las acusaciones de que el presidente pasó por alto las advertencias de malversación relacionadas con una empresa estatal de transporte de petróleo. 

Lasson negó las acusaciones y argumentó que la destitución obedecía a motivos políticos. Entonces llamó a elecciones anticipadas (primera ronda 20 de agosto y segunda ronda el 15 de octubre) como “una oportunidad para unir al país en medio de la violencia de las bandas y la crisis política”. 

Un trasfondo de violencia y crimen organizado.

Ecuador se enfrenta a una crisis de seguridad cada vez más grave desde 2018, marcada por los conflictos entre organizaciones delictivas vinculadas al narcotráfico. La violencia se ha visto exacerbada por el aumento de la producción de hoja de coca en los vecinos Colombia y Perú, lo que ha contribuido al flujo de cocaína y base de coca a través de sus fronteras.

La situación se complicó cuando los límites de Ecuador con Colombia se hicieron más porosos y miembros de las FARC que se oponían al acuerdo de paz de 2016 se trasladaron a Ecuador.

La crisis de seguridad en Ecuador se extendió al sistema penitenciario del país con sucesos como los motines de febrero de 2021 en las cárceles ecuatorianas y el motín de septiembre de 2021 en la cárcel de Guayaquil, considerado una de las masacres carcelarias más mortíferas de la historia latinoamericana. 

Un informe de 2022 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos calificó al gobierno de haber «perdido el control» de sus prisiones. La violencia en las prisiones ha tenido un impacto significativo en la situación general de la seguridad en el país.

Según distintos reportes de prensa, carteles de la droga mexicanos así como la mafia albanesa habrían establecido operaciones en Ecuador, lo que ha generado un aumento de los asesinatos, con una tasa de homicidios que alcanzó los 14,04 por cada 100.000 habitantes en 2021, la más alta desde 2011. 

Para Oliver Stuenkel, profesor asociado de la Escuela de Relaciones Internacionales de la Fundação Getulio Vargas (FGV) de São Paulo, Brasil, e investigador no residente de la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, el tema de la seguridad sería determinante en las elecciones de Ecuador. 

«Desde 2018, la tasa de homicidios de Ecuador se ha cuadruplicado y ahora es más alta que la de Colombia o México. La ubicación de Ecuador entre los dos mayores productores de cocaína del mundo, Colombia y Perú, hace de sus puertos un lugar privilegiado para exportar cocaína al mercado internacional».

El resultado de las elecciones demostró la capacidad de Noboa para aglutinar el voto anti-Correa, asemejándose a las elecciones anteriores en las que Guillermo Lasso derrotó por un estrecho margen al candidato pro-Correa, Andrés Arauz.

Daniel Noboa y el poder legislativo, electos este 15 de octubre, cumplirán funciones hasta que concluyan los mandatos presidencial y legislativo actuales, los cuales abarcan de 2021 a 2025, a partir del 25 de noviembre de 2023. Posteriormente, se prevé que a principios de 2025 se celebren elecciones ordinarias para un mandato regular de cuatro años.

Ecuador elige al presidente más joven de su historia