“Todo ha transcurrido con normalidad”. Esta frase es bastante usada y hasta sosa, ubicua, utilizada en cualquier área del quehecer diario, pero que puede indicar lo opuesto si hacemos algunos arreglos, pudiéndose transformar en: “nada ha transcurrido con normalidad”. Aún más, la frase original, en un entorno de normalidad, en un país, cuya sociedad sea estable, es redundante e innecesaria.
La frase en cuestión, desde un punto de vista lógico, arroja que es apropiada en un contexto donde nada o casi nada es normal. En Venezuela ocurre que, siendo un país donde casi en ningún ámbito de la cotidianidad, las situaciones son sanas o naturales, la frase es utilizada para hacer creer que, efectivamente y en grado superlativo, todo está bien y normal. Para aclarar los términos, en Venezuela se estaría hablando no de una situación normal, sino de una situación característica.
Es curioso que esta frase, sea incluso repetida entre tres y cinco veces por comunicadores sociales de la radio, en la descripción de una noticia o segmento informativo que no supera los cinco(05) minutos, cuando se refiere,por ejemplo, a la llegada de insumos o un producto biológico de inmunización, a un hospital. Puede argumentarse que la actividad ha sido un éxito o tal vez que el proceso fue muy eficiente, pero en Venezuela y en específico en el área de salud, decir que, “todo ha transcurrido con normalidad”, es asegurar que ciertamente es un hecho fortuito y producto de la casualidad.
La manipulación en el uso del lenguaje, es un mecanismo real de expansión del socialismo y las dictaduras; dicho de otra forma,su objetivo esdesplazar la democracia y eliminar la libertad.Si naturalmente todo está normal o cuando no lo está, forzamos esa suposición; entonces una sociedad en su proceso de mejora, se estanca, retrocede y puede desaparecer.El país que tanto queremos y que se está perdiendo, necesita un cambio de pensamiento de cada uno de sus habitantes, con la convicción de que algún día serán ciudadanos y además buenos ciudadanos.
Es por esta razón, que casi exclusivamente la clave para salir adelante, es que las personas reconozcan lo que está mal y luego de una elaboración mental,visualizar una situación diferente; es decir, cuál es la forma correcta o como deben hacerse las cosas bien. Aquí se presenta el umbral más difícil de sobrepasar: creer que se puede hacer algo diferente, se ha entendido su necesidad y luego hacerlo, de manera que, a un modo de percepción generalizada,la conducta que prevalezca en las personas, sea la de reconocer y hacer las cosas bien, generar una nueva realidad, lograr calidad de vida y de esta forma transformarse en una sociedad estable.
The post Abraham Sequeda: Todo ha transcurrido con normalidad appeared first on LaPatilla.com.
