Para todos los amigos del grupo Irama
Un mito urbano creado por la magia de la escritura, eso es la fuente de soda Irama. Su autor, Norberto José Olivar, importante escritor que, en sus crónicas y novelas, lo ha convertido, de alguna manera, en un micro-cosmos de anécdotas y personas, que la palabra y el tiempo conservarán gracias a la literatura.
Un poco como el bar Piel Roja del grupo Apocalipsis, Irama también fue territorio propicio para las tertulias que sirvieron de excusa para crear el “Grupo Irama” y el “Círculo Borgiano” simples “conversaderos” de amigos, que disfrutábamos, sin otra pretensión que pasarla bien, con abundante café, siempre.
Cada uno con su aporte de libro leído y película vista. Libertad de opinión y pensamiento, nadie trataba de convencer a nadie y todos oíamos con atención y respeto y todos aprendíamos de todos. Pluralismo y tolerancia y el humor necesario para seguir en una cotidianidad de país destruido.
Debido a ello, algunos tuvieron que emigrar. La realidad venezolana nos obligó a sustituir a Irama por el WhatsApp, pero allí también está el espíritu del encuentro que caracteriza la inteligencia y la cultura de la ciudadanía en sentido clásico, de donde nace la interrogación socrática y el diálogo platónico, el ágape.
La amistad real no es más que eso, el encuentro gratuito sin otra intención que conversar.
La cultura es social por naturaleza, igual el conocimiento, se alimenta de la inteligencia social y la cultura colectiva. Norberto tiene una amplia e importante obra narrativa, publicada casi toda en Alfaguara, quizás la más conocida, Un vampiro en Maracaibo (de ella se hizo una versión cinematográfica), pero hay otros libros de él que vale la pena leer. Su trasfondo casi siempre es Maracaibo o personajes locales o leyendas del lugar. El misterioso caso de Agustín Baralt, El fantasma de la Caballero, El hombre de la Atlántida (sobre Jesús Enrique Lossada), Un cuento de piratas, y hasta Rafael Urdaneta y Rafael María Baralt han sido objeto de atención en su última novela próxima a publicarse.
Norberto, historiador de formación y oficio, lector enciclopédico, es un escritor de vocación y convicción. Irreverente e irónico, desarrolla una escritura sugerente y motivadora, en el sentido del disfrute y aprendizaje, con su lectura.
Invito a leerlo.
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